Fusiones en la música cristiana

Hace algún tiempo, estoy abierta a escuchar todo tipo de música, desde los Boleros, pasando por el jazz, la bossanova, el blues, baladas, hasta música cristiana. Contando un poco mi experiencia personal, escuchar música cristiana fue muy motivadora, pues hizo en mi que la fe que tengo por Dios crezca aún más, y es así que desde pequeña tengo el gran gusto por cantar.

Fue de una forma muy particular que comencé a cantar canciones cristianas, recuerdo mucho, que mientras mi familia salía de compras, yo prefería quedarme en casa, (sabía lo que vendría después “cantar” hasta que antes que llegaran mis papás) y siempre llamaba a mi inseparable amiga carolina (que vivía en el segundo piso).

Todo estaba “fríamente calculado”, cerraba todas las ventanas de mi casa, y empezábamos lo que mejor sabíamos hacer “cantar”, bueno al menos eso creíamos, empezábamos con valses criollos, música cristiana, cantante como mariah carey, whitney Houston, etc.

Retomando el tema, desde ahí fue que empecé a cantar canciones cristiana, (aproximadamente 12 años de edad) como Jacy Velásquez, lilly godman, Jesús Adrian Romero, Marcos Vidal, y una de las cantantes que admiraba mas en ese entonces era “Cristal Lewis”, discos como la belleza de la cruz, la esposa, fearless, hacían en mi que fuera inevitable empezar a cantar sus canciones y tener los ojos rojos, pero sintiendo una fortaleza en mi interior, no era tristeza, era alegría, algo difícil de explicar.

Esa sensación me empezó a gustar y empecé a buscar más cantantes, entonces encontré a una cantante con la cual me identifico, “Julissa”, me sorprendió las fusiones musicales que hacía con su música, y me agradaba más que fuera música cristiana. Era interesante introducir una guitarra española, con salsa y luego introducir funky.

Así, encontré más cantantes que habían tomado esta modalidad de fusionar sus canciones, la cual atraía a más gente a escuchar sus canciones.

Todo en la música “vale”, y eso es lo más maravilloso, puedes convertir sentimientos en un abrir y cerrar de ojos, con tan solo fusionar sonidos.